22 abril 2017

Día del Libro 2017

Mañana, 23 de abril, se celebra el Día del Libro. Muchos son los actos que tienen lugar en torno a esta fecha, en que se conmemoran las muertes de Miguel de Cervantes y de William Shakespeare. Para unirme a esta efeméride incluyo aquí una fotografía de un Monumento en homenaje a Cervantes, realizado por el escultor uruguayo José Jacinto Mora, que se encuentra en el Golden Gate Park de San Francisco (California, Estados Unidos).


El secreto de la modelo extraviada, de Eduardo Mendoza

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Ha sido un placer leer esta novela del actual Premio Cervantes, Eduardo Mendoza. En ella vuelve a hacer una demostración de su dominio del lenguaje, del humor, del ritmo, de la crítica y de su conocimiento de la ciudad de Barcelona y sus habitantes. Bajo el pretexto de contarnos una disparatada historia policíaca, lo que en realidad hace es una feroz crítica de nuestro tiempo y de los derroteros que ha tomado esa ciudad que tanto prometía en 1992: corrupción, marginalidad, pobreza, explotación, inmigración, delincuencia, fracaso, desencanto, política, son temas que desfilan a lo largo de las páginas de este trepidante relato protagonizado por el anónimo detective recluido en un psiquiátrico que ya lo ha hecho en anteriores novelas de este autor. Los personajes que le acompañan son prototipos de una sociedad como la catalana, que se ve sobrepasada por sus ganas de medrar. La historia comienza cuando el protagonista, ahora chico para todo en un restaurante chino, recuerda un caso que años atrás quedó falsamente resuelto: la muerte en extrañas circunstancias de una modelo. Reivindicación de la comedia en la novela, como es costumbre en Eduardo Mendoza. Lectura muy recomendable.

Me llamo Suleimán, de Antonio Lozano

El pasado jueves, los alumnos de 4º ESO y algunos de 3º ESO A y B acompañados por Antonio García, Yolanda Páez  y por mí  (tutores de 4º A, 3º B y 4º B, respectivamente) asistieron a una función escolar en el Teatro Cuyás en la que se representaba la obra Me llamo Suleimán, de Antonio Lozano. En ella se cuenta la historia de Suleimán, un niño que deja Mali para huir de la pobreza y se dirige a Europa. Tras un intento fallido en Melilla, es abandonado en el desierto y logra llegar a Gran Canaria, donde reside durante una temporada hasta que, finalmente, es deportado a su país. Las penurias del viaje son narradas sin rencor, pero con una dureza que logra conmover al espectador. La encargada de hacerlo es la actriz Marta Viera, que da vida a Isabel, una compañera de clase de Suleimán, y al propio protagonista. La interpretación de Marta es magnífica, ya que sobre ella recae el peso de la representación puesto que se trata de un monólogo, y las condiciones a las que se tuvo que enfrentar el jueves no eran idóneas precisamente: el patio de butacas estaba repleto de estudiantes que ofrecieron variadas muestras de lo que es falta de educación en forma de gritos, silbidos, comentarios en voz alta, estornudos y toses ruidosas, risas a destiempo, etc. Yo los contemplaba desde el Anfiteatro Bajo donde nos colocaron y no podía creer lo que estaba viendo. Aplaudo las dotes de concentración de la actriz, que sólo en una ocasión pareció perder el hilo de los acontecimientos. Capítulo aparte merece la puesta en escena, con la disposición del escenario y la animación audiovisual de Juan Carlos Cruz que dejaron atónitos a más de uno, entre los que me incluyo. Gracias a esta última pudimos ver a Suleimán, a su madre, a sus amigos, a sus compañeros de viaje, el desierto, el mar, el camión y el cayuco en los que viajó. Muy emotivo fue el saludo final de la actriz y del protagonista agradeciendo juntos los aplausos del público. La música de Salif Keita constituye un elemento enriquecedor del espectáculo: ambienta y añade emoción a los momentos cumbre de la función.

Visitas culturales en el Hierro

Centro Etnográfico Casa de Las Quinteras, situado en pleno corazón de la Villa de Valverde, capital de la isla de El Hierro. Se trata de un museo que recoge muestras etnográficas de la isla, repartidas en cuatro salas destinadas a taller, herrería y telar, artesanía textil de madera y barro. A la entrada hay una tienda donde se pueden adquirir artículos elaborados por artesanos herreños. Una vez dentro, en la primera de las salas hay unas pequeñas banquetas en torno a una pantalla de vídeo dispuestas para que el visitante se siente y visione un interesante vídeo explicativo, después de lo cual procederá a la visita de cada una de las salas en las que hay paneles informativos. La casa que acoge este Centro es una edificación típica muy bonita, como se puede apreciar en las imágenes.



                                                       










Central Hidroeólica Gorona del Viento, en el entorno del Puerto de La Estaca. Se puede realizar una visita guiada que corre a cargo de Cristina, del Departamento de Comunicación. En ella se explica el funcionamiento de la central, los beneficios que aporta a la isla, el cuidado que tienen que tener con todo lo relacionado con la conservación del entorno (no hay que olvidar que la isla es Reserva de la Biosfera), etc., a la vez que se hace un recorrido por sus instalaciones y se responde a cualquier pregunta que se quiera formular sobre el tema.











18 abril 2017

Educación e interioridad, de J.M. Castro Cavero

He tenido ocasión de leer esta comunicación presentada por un compañero del instituto, profesor de Religión, en un congreso sobre el tema de la Educación y estoy completamente de acuerdo con sus afirmaciones. De que la escuela se encuentra en crisis no hay ninguna duda: los que nos dedicamos a esta bella profesión lo sabemos y luchamos contra ella a diario; y el motivo lo apunta muy acertadamente mi compañero: porque no responde como se espera de ella a los desafíos que plantea el cambio de paradigma. Tras repasar los dos modelos defendidos por  la izquierda  cultural y política (de carácter más social) y por los conservadores y neoliberales (más interesados en la eficiencia educativa), reconoce la complejidad del estado actual de la educación y recurre a la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que defiende el principio fundamental que consagra como "objeto de la educación el pleno desarrollo de la personalidad humana". Seguidamente analiza el significado de estas palabras y llega al concepto de la interioridad tratado, entre otros, por María Zambrano y Ortega y Gasset. Interioridad y educación están estrechamente vinculadas entre sí y, según apunta José Manuel, "si la escuela descuida o abandona la atención a la interioridad, pierde su orientación, su identidad, su objetivo, y quedará a merced del descrédito y del desconcierto. Cuando no se sabe para qué se estudia [...] cualquier esfuerzo se entiende desmotivador y, por lógica, a la escuela se le pedirá entretenimiento; su fin no será otro que procurar ocio inmediato. Cuando sucede este bucle escolar, quienes acaban sufriendo sus consecuencias son el profesorado y el alumnado, en primer término, y de fondo, la sociedad en conjunto". Modestamente, debo añadir que esto ocurre cada día en los institutos: los alumnos preguntan una y otra vez para qué estudian o para qué sirve lo que tienen que estudiar, y realizar cualquier esfuerzo por mínimo que sea les cuesta, a la vez que nos piden a los profesores que las clases sean divertidas porque si no lo son se aburren. A mí, personalmente, me produce cierta angustia esta reclamación porque tengo muy claro que estudio y diversión son por naturaleza antagónicos y, aunque trato de hacer las clases más amenas, no renuncio a impartir los contenidos que considero fundamentales para su desarrollo en un ambiente propicio para su asimilación, alejado de la dispersión y el relajo. Trabajo cooperativo y colaborativo sí, pero dentro de un orden. Finalizo esta reflexión sobre el artículo defendiendo la necesidad de implementar la interioridad en las aulas, ya que como señala su autor: "propicia la interdisciplinariedad, equilibra el currículo, clarifica los modelos de identidad del alumnado y del profesorado, reclama la participación familiar y orienta el servicio de las instituciones".     

Me ha gustado también, por razones obvias, la nota dedicada a Don Quijote de la Mancha, cuando su protagonista instruye a Sancho para el buen gobierno de su ínsula y le recomienda que antes de hacer nada al respecto se conozca a sí mismo. 
                                                                                                                                                                   

16 abril 2017

La poesía, en todas partes

Muy grata la sorpresa que me llevé al descubrir en la terminal de salidas de Binter en el Aeropuerto de Gran Canaria, los fragmentos de algunos poemas de poetas canarios escritos en la pared decorando una cafetería instalada en sus dependencias. No pude evitar fotografiarlos y colgarlos en este blog.





Como pueden comprobar, cualquier sitio es bueno para disfrutar de la poesía. ¡Felicidades por la iniciativa! ¡Ojalá cunda el ejemplo!

02 abril 2017

El corazón de las tinieblas, de Joseph Conrad

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Interesante relato de las aventuras de Charles Marlow en África, lugar al que llega respondiendo a una imperiosa llamada de su destino. Nadie le reclama allí, pero él siente la necesidad de navegar por ese río africano cuyo nombre nunca revela y de trasladarse a ese continente lejano y misterioso. Para ello recurrirá a sus influencias, especialmente a una anciana tía que le encuentra un puesto de capitán de vapor en una compañía belga y que le crea una fama que traspasa fronteras, hasta tal punto que algún empleado de la compañía en África le cree un personaje relevante e intenta ganarse sus favores para ascender dentro de la misma. La misión de Marlow es sacar a Kurtz, un misterioso y exitoso empleado de la compañía, de la selva. Cuando al fin lo encuentra será tarde: Kurtz está muy enfermo, muere en el barco que surca el río y será arrojado a éste. El éxito de Kurtz en la recolección de marfil y en la fama que se gana entre los nativos ha sido conseguido utilizando métodos nada ortodoxos pero eficaces para los intereses económicos de la compañía. Las últimas palabras que pronuncia este mítico personaje son ¡El horror!, ¡el horror!, lo que nos da una idea de cómo ha sido su vida allí. Antes de morir entrega unos documentos a Marlow que la compañía le reclamará después, una especie de legado en el que cuenta cómo se puede mejorar la situación en la colonia, y unas cartas a su prometida, que Marlow le entregará en Inglaterra a su regreso. 

La novela denuncia el maltrato a los nativos y a la selva, y los cambalaches que hacen los colonos para enriquecerse con el marfil. Se trata de un relato autobiográfico de Conrad, que en su juventud ejerció su profesión de marino en el río Congo y comprobó de primera mano los horrores cometidos por Leopoldo de Bélgica en ese bello y rico territorio. La selva y el río están presentes como protagonistas de la historia, de manera que transmiten al lector la sensación de estar allí presenciando todo ese desatino. Lectura muy recomendable propicia para reflexionar,