06 septiembre 2022

Reseña de 'Hamnet', de Maggie O'Farrell

 

Novela de extraordinaria belleza que recoge un capítulo de la biografía de William Shakespeare poco conocido por el gran público: la muerte de Hamnet, su hijo de once años, que dio nombre al fantasma más célebre de la literatura isabelina, Hamlet. Este relato se centra en la vida de la esposa de Shakespeare, Agnes, con la que se casa muy joven pese a la oposición familiar, por encontrarse ella embarazada. Agnes arrastra un pasado de orfandad de su madre, a la que se encontraba muy unida, y una mala relación con su madrastra, Joan, mujer celosa que no puede competir con el recuerdo que dejó la madre de Agnes en sus dos hijos y en su marido. Agnes hereda de aquélla su pasión por la naturaleza y por aplicar las plantas medicinales en el remedio y la cura de las enfermedades de sus familiares y vecinos. Shakespeare se enamora de ella desde que la ve y juntos compartirán una extraña historia de amor en la que la lejanía física hace mella, especialmente en los momentos más trágicos de sus vidas. La pasión del dramaturgo por el teatro y la mala salud de su hija Judith, gemela de Hamnet, provoca que la familia siga residiendo en Stradford, mientras él se traslada a Londres donde llevará una doble vida. Ante la muerte del niño los padres reaccionarán de diferente manera, aunque el dolor afectará a ambos intensamente como la propia Agnes descubrirá al final de la novela. El estilo empleado por la autora -muy poco diálogo, frecuentes retrospecciones y anticipaciones, y distintas formas de referirse a Shakespeare sin emplear su nombre ni su apellido en ningún momento- evoca una atmósfera poética y misteriosa. La variedad de temas imprime una gran riqueza al relato: maltrato infantil, violencia, amor incondicional entre gemelos, ambición, egoísmo, maledicencia, envidia, impotencia, muerte... Los personajes están perfectamente trazados: la protagonista, extraña mujer que añora a su madre muerta, ama profundamente a sus hijos y quiere a su marido, al que a veces no comprende; Shakespeare, marcado por la relación con su padre, que encuentra su liberación en el teatro por el que renuncia a vivr con su familia, a la que sin embargo ama; los hijos, que extrañan la ausencia del padre y aprenden a vivr sin él; y tantos otros que desfilan a lo largo de la narración El ambiente teatral de la época queda muy bien reflejado y capítulo aparte merece la descripción de la epidemia, cuyo origen y expansión aparecen aquí magníficamente reconstruidos. Maravilloso final, en consonancia con la calidad de la novela. Lectura imprescindible.