Título: Los renglones torcidos de Dios
Autor: Torcuato Luca de Tena
Editorial: Planeta
Fecha de publicación: 1979
Número de páginas: 448
La trama de este libro se desarrolla en un hospital psiquiátrico y, como nos explica el psiquiatra Vallejo Nájera en el Prólogo, su autor llegó a ingresar en una institución de este tipo para observar directamente los comportamientos de los pacientes y del personal que en ella trabajaba y reflejarlos en la novela de la forma más verosímil posible. Dividida en 29 capítulos con título, encabezados cada uno de ellos por una letra del alfabeto, la historia que narra está protagonizada por Alice Gould, una atractiva e inteligente mujer que es ingresada en un sanatorio mental tras haber intentado envenenar a su marido en tres ocasiones. Esa es, al menos, la versión oficial del ingreso; porque la propia Alice contará una versión bien diferente según la cual ella ha ingresado voluntariamente para investigar un crimen que se ha cometido en el centro, ya que es detective y ha sido contratada por un cliente para que averigüe quién ha asesinado a su padre. Añade, además, que el director del hospital está informado de todo y que ha prometido colaborar con ella en la investigación. Pero cuando llega, el dr. Samuel Alvar -que así se llama el director- está de vacaciones y es entrevistada por otro médico que sospecha que padece paranoia y le da el mismo tratamiento que al resto de los pacientes. La situación de Alice se complica de tal modo a lo largo del relato que el lector no tendrá claro si está enferma o no, ya que cuando regresa el director niega la versión de Alice y confirma el diagnóstico: paranoia. La ambientación de la historia está muy lograda, aunque la excesiva confianza de la protagonista con el personal del sanatorio no resulta muy creíble, y lo mismo ocurre con su actitud altiva y resabiada en algunas ocasiones, que llega a dar a entender que conoce a los pacientes mejor que sus propios médicos. Lo que sí consigue el autor es retratar perfectamente a los internos y sus trastornos, el ambiente opresivo que les rodea, las luchas de poder entre los médicos, las inseguridades de los enfermos recuperados antes de reincorporarse a la sociedad, la soledad, la sordidez de algunos de sus comportamientos y el olvido que sufren por parte de sus familias. El ritmo es ágil, Luca de Tena se las ingenia para dosificar adecuadamente los ingredientes de la trama a fin de captar la atención del lector de principio a fin. Algunos personajes destacan por su cercanía con Alice, como el dr. Arellano, Montserrat, Ignacio Urquiza, los gemelos Rómulo y Remo, la niña Oscilante, Sergio Zapatero "el autor de la Teoría de los Nueve Universos" o Cosme "el hortelano". El lenguaje no es muy técnico, por lo que cualquier lector puede seguir la historia aunque carezca de conocimientos sobre psiquiatría, pero en el caso de Alice resulta algo engolado en ciertos momentos de la narración.
El título de la obra viene de unas reflexiones de la protagonista: