Título: Tan poca vida
Autor: Hanya Yanagihara
Editorial: Lumen
Fecha de pubicación: 10 de marzo de 2015
Número de páginas: 1001
Confieso que no conocía a la autora hasta que tuve noticia de esta novela en la red social X hace pocos meses. No me extraña el éxito que ha obtenido. Yanagihara ha conseguido una novela redonda, monumental, desgarradora y maravillosa; una de esas novelas que lees, te atrapa, te emociona, la terminas y sigues dándole vueltas en tu cabeza. Y eso que tiene mil páginas.
La trama gira en torno a cuatro amigos que se conocen en la universidad -Willem, Malcom, JB y Jude- y a cómo se desarrollan sus vidas desde entonces hasta la muerte de tres de ellos, una amistad que dura más de treinta años y que supera muchas dificultades y desencuentros, pero que logra sobrevivir con una fortaleza indiscutible. El relato tiene como centro a Jude, un personaje sublime en el que sobresalen el dolor, la culpa, el remordimiento, la falta de autoestima, la inteligencia, la resiliencia, los complejos, el miedo, la lealtad y el amor; el resto de personajes, Harold, Julia, Andy, Richard -además de sus tres amigos- gira a su alrededor, respetando sus silencios, sus secretos y apoyándole en su enfermedad. Temas como la amistad, el abuso sexual, la discapacidad, la superación, la renuncia, el sexo, la infancia truncada, el abandono, el engaño, el secuestro, el derecho a la intimidad, las autolesiones, la muerte, el suicidio, la enfermedad mental, la adopción, la soledad... son tratados de manera admirable, impactando en el lector que empatiza con el sufrimiento del protagonista y con la impotencia de su círculo, que a veces no sabe cómo ayudarle a pesar de los esfuerzos que realiza. La autora no da tregua al lector, que tiene que asimilar la dureza de algunos episodios, temer que los escasos momentos de felicidad compartidos por los personajes no duren y descuadrarse ante el efecto sorpresa que también aparece a lo largo del relato. Todo ello en medio de un ambiente neoyorquino en el que se combinan el mundo universitario, el de la interpretación, el arte, la arquitectura, la abogacía y distintos escenarios de los que proceden y a los que viajan los personajes por diversos motivos. Los recursos técnicos empleados son muchos y variados: retrospecciones, anticipaciones, narrador omnisciente, narrador protagonista, narrador testigo, perspectivismo, etc. El lenguaje es sencillo y directo. Una novela de lectura imprescindible pese a su crudeza.


