27 diciembre 2012

Del ático al entresuelo, de Pedro Pablo Padilla

Novela sencilla, sin pretensiones, esta que he leído en estos días de vacaciones. Novela de perdedores, de gente derrotada por las circunstancias, que en unos casos es capaz de remontar y en otros no. A estos últimos pertenecen las dos Amancias: madre e hija, artistas de revista de medio pelo que tratan de sobrevivir como pueden, asumiendo los errores cometidos y refugiándose en la bebida. Aparecen también en el relato algunos personajes bien trazados, vecinos del mismo edificio madrileño donde transcurre la acción: don Lino, Serafín, Faustina, doña Cloti, etc. Esta novela obtuvo el III Premio Ateneo de Sevilla en 1971.

22 diciembre 2012

Enganchados a la lectura

Nunca está de más un toque de humor. ¡Ahí va eso!

19 diciembre 2012

Caramelo, de Sandra Cisneros



Magnífica obra esta que acabo de leer: completa, sensible, amena, de ritmo ágil... No sé qué más calificativos añadir a esta novela, bella muestra de la literatura chicana actual. Trata de la peripecia vital de tres generaciones de una familia, varios de cuyos miembros emigran de su México natal a Estados Unidos. La autora mezcla hechos y acontecimientos reales sucedidos a miembros de su familia con rumores, suposiciones, etc., que ella denomina cuentos. Hay escenas y diálogos verdaderamente emocionantes. A destacar el uso que hace de la lengua reproduciendo la curiosa mezcla que efectúan del español y del inglés los miembros de la comunidad latina -en este caso mejicana- en Estados Unidos. Lectura absolutamente recomendable.

Cuando era chica, había cosas en las que no podía pensar sin que me doliera la cabeza. Uno: lo infinito de los números. Dos: lo infinito del cielo. Tres: lo infinito de Dios. Cuatro: lo finito de mamá y papá.
He superado del número uno al tres, pero el número cuatro, pues, no importa si tuvieras dos vidas para hacerte a la idea, no creo que nadie esté preparado para la muerte de su mamá o su papá, ¿no crees? Podrían tener ciento cincuenta años, y todavía gritarías: "¡Eh, un momento!", cuando les llegara la hora. Eso es lo que creo.  (pág.489)

Papá tiene los ojos cerrados. Ni siquiera sabe que estoy aquí. Un monitor que muestra algo en su interior forma cordilleras de "uves" en una pantalla. Esa aguja nerviosa brinca de arriba  abajo y da un pitido de vez en cuando, y el corazón de mi papá no anda muy bien, y cómo me gustaría intercambiar corazones, darle el mío porque es tan atroz ver a papá así, enchufado a tubos y bolsas de plástico y máquinas, su cuerpo hecho jirones y cansado y arruinado, acabado, creo. (pág.492).

15 diciembre 2012

Nueva novela de Alexis Ravelo


El contexto de "asalto al estado del bienestar por parte de los poderes económicos" que se vive actualmente posibilitará el reencuentro del lector de novela negra con Eladio Monroy, el peculiar investigador que hizo famoso al escritor Alexis Ravelo, en un nuevo libro, Morir despacio, publicado por Mercurio Editorial, que se presentó el día 5 en el Museo Domingo Rivero de la capital grancanaria.


Aclarar las circunstancias del suicidio de un informático que hacía trabajos para un periódico digital a instancias del padre de la víctima, amigo suyo, será el reto que, transitando entre una trama de corrupción, deberá afrontar el antiguo marinero metido a detective en la cuarta entrega de las aventuras de Eladio Monroy.



La ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, donde viven el personaje y su creador, será una vez más el escenario de esta nueva intriga, que Alexis Ravelo ha vuelto a tejer con la combinación de elementos tomados de la realidad y la ficción habitual en las historias de Monroy, a cuyos seguidores confía en no decepcionar el escritor, según ha confesado en una entrevista concedida a Efe.

13 diciembre 2012

Frase para reflexionar

Cuando el corazón decide, no hay neurona que lo detenga.
Esta frase la leí en una pared cercana al Auditorio Alfredo Kraus, de Las Palmas de Gran Canaria. Me ha dado qué pensar. Debe ser que a mucha gente que pasea por Las Canteras le ha pasado, porque al día siguiente la habían borrado. Ya se sabe, en los tiempos que corren lo mejor es que la gente no piense. ¿O sí?

07 diciembre 2012

Víctor García de la Concha piensa que hay que cuidar el uso de nuestro idioma




El director del Instituto Cervantes, Víctor García de la Concha, cree que la lengua española hablada no pasa actualmente por su mejor momento. Hay «una gran dejación en el modo de hablar» y se ha puesto de moda no ya el empleo generalizado de tacos, sino «el no cuidar el idioma».
«Estamos en un momento más bien zarrapastroso», aseguraba  García de la Concha durante la presentación, en la sede central del Cervantes, de El libro del español correcto, una obra útil y de redacción muy clara que proporciona toda la información necesaria para hablar y escribir bien en español.
Publicado por Espasa, el libro completa la serie de Guías prácticas del Instituto Cervantes, que desde el 2007 ha permitido editar breves manuales sobre gramática, ortografía, el español correcto y la escritura y redacción.
La obra que ahora ve la luz es más ambiciosa en sus objetivos, más amplia (tiene 561 páginas) e incluye información sobre ortografía, gramática, diferentes modelos de textos escritos y sobre el español que se utiliza en los SMS y en internet.
Director de la Real Academia Española desde 1998 hasta el 2010 y máximo responsable del Cervantes desde enero del 2012, García de la Concha se quejaba del poco cuidado que la mayoría de los hablantes ponen al utilizar su lengua, sin que desde la institución que él dirige —ni tampoco desde las Academias— se pretenda «proponer como alternativa una expresión cursi, relamida».
Pero sí debería haber «una corrección normal», y para facilitarla nace el libro presentado hoy, coordinado por Florentino Paredes.
A título anecdótico, García de la Concha recordó el español tan cuidado que empleaba el gran filólogo Rafael Lapesa, hasta el punto de que cuando iba en coche y otro conductor le hacía una faena, «bajaba la ventanilla del coche» y lo más que salía de su boca era un «¡imprudente!».
Esa corrección la atribuía Lapesa a la labor que había hecho en España la Institución Libre de Enseñanza, en parte para contrarrestar la moda que hubo en el siglo XIX de hablar mal.
«No digo que estemos en una época como la que Emilia Pardo Bazán reflejaba en su novela Insolación, referida a esas décadas de finales del XIX en las que hablar mal vestía incluso en los salones, pero estamos en un momento en el que hay una gran dejación en el modo de hablar», insistió García de la Concha.
Acompañado por la directora general de Espasa, Ana Rosa Semprún, para quien el nuevo libro «es muy completo, fácil de leer» y contiene información sobre todos los aspectos de la comunicación oral y escrita, el director del Cervantes le restó importancia a las incorrecciones tan frecuentes en los SMS y al exceso de abreviaturas que se emplean en esos mensajes.
«El problema está en la formación básica de quien eso escribe. Si los colegios de primaria vuelven a enseñar lo básico, leer —también en alta voz—, escribir, redactar, el peligro de que esa generación escriba mal con los SMS queda minorado», dijo García de la Concha, poco ducho, según confesó, en enviar mensajes porque no se maneja bien con los teléfonos móviles.
Pero distinto es cuando se escribe en un teclado de ordenador. «Ahí no existen excusas para escribir mal», aseguró el director del Cervantes, tras recordar que la escritura «nació ligada a las abreviaturas y a la convención, porque las tablillas de cera y los pergaminos eran soportes muy costosos y había que aprovecharlos».
La diferencia es que en la Edad Media «había unas convenciones y ahora no las hay. Cada uno abrevia como puede en los mensajes y en otro tipo de comunicaciones», añadió.
Como subrayó Florentino Paredes,  El libro del español correcto es una obra «útil para el lector, fácil de consultar» (el índice final es muy completo) y con abundantes ejemplos. Contiene modelos de textos escritos, incluidos los que se utilizan en internet, y enseña cómo defenderse en una entrevista de trabajo o como hablar en público, entre otras muchas cosas.
«Es un libro claro, de redacción cercana; es ameno y no está destinado a especialistas, y su contenido es riguroso y actual», afirmó Paredes, coautor de la obra junto con Salvador Álvaro García, Zaida Núñez y Luna Paredes.
Y un libro que recuerda que, al escribir y al hablar, no conviene abusar de fórmulas «cansinas» ni de muletillas como «agenda apretada», «denodado esfuerzo», «caldear el ambiente», «paisaje idílico» o «rabiosa actualidad».
En numerosos apartados se deja claro con ejemplos cuáles son las expresiones o usos más correctos y, así, en el de extranjerismos se aconseja utilizar juego limpio en lugar defair play; pirata informático en vez de hacker; contraseña y no password; enlace o vínculo en lugar de link; horario estelar y no prime time y sobreventa o sobrecontratación en vez de overbooking.

04 diciembre 2012

Caballero Bonald, Premio Cervantes 2012



El narrador y poeta José Manuel Caballero Bonald ha ganado el Premio Cervantes 2012, considerado el galardón más importante de las letras hispanas y que concede el Ministerio de Cultura al conjunto de la obra de un autor.
El fallo de este premio, considerado el Nobel de literatura en lengua española y dotado con 125.000 euros, ha sido hecho público hace unos días por el ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, y será entregado en una solemne ceremonia el próximo 23 de abril.
Aunque no figura en las bases del premio, se cumple de nuevo la regla "no escrita" de que el Cervantes se reparta cada año alternativamente entre Latinoamérica y España, después de que en la edición de 2011 el galardón fuera para el poeta chileno Nicanor Parra.
He leído varias de sus obras narrativas -Dos días de septiembre, Toda la noche oyeron pasar pájaros, Ágata ojo de gato- y me han gustado mucho. Merecidísimo premio.